La mudanza fue tenazmente resistida por los simpatizantes, al punto de que 1300 de los 1600 socios con que contaba Boca decidieron dejar de pagar su cuota mensual, bajando su popularidad. La de Boca Juniors de 1981 fue distinguida como la mejor de América, ocupando el 12.º puesto a nivel mundial. Desde su fundación, el club peregrinó por distintos campos de juego, casi todos ellos ubicados en el barrio de La Boca.